PULTI TESTIMONIAL

PULTI TESTIMONIAL

Ricardo Bengolea



Nuevamente el Intendente se ha dejado llevar por su imperiosa necesidad de sobrevivir políticamente. Es una vergüenza que haya aceptado convalidar el fraude planteado por Néstor Kirchner aceptando ser primer candidato a Senador por la Provincia de Buenos Aires, sabiendo que en definitiva nunca va a asumir. Es una mentira. Un fraude tanto para sus seguidores como para el resto de la ciudadanía marplatense. Un cachetazo a la ética republicana que inviste su cargo municipal para lo cual fue designado por la mayoría de los votos. Actuó de la misma forma cuando a mediados del 2008 el sector agropecuario y la mayoría de los ciudadanos de nuestra ciudad le reclamó defender la autonomía de la ciudad en contra del defalco más escandaloso que propuso el Gobierno Nacional quedándose con más de 200 millones de pesos fruto de las retenciones que el sector agropecuario enviaba a la Nación en concepto de impuesto a las exportaciones.
Las listas testimoniales constituyen delito. La boleta electoral oficializada es un documento público. La introducción de elementos falsos en la boleta electoral constituye el delito de falsedad ideológica de instrumento público tipificado en el artículo 293 del Código Penal.
Asimismo constituye delito de falsedad material por alterar, sustituir el nombre u orden de los candidatos, tipificado en el artículo 292, 2º párrafo del Código Penal y artículos 138 y 139 del Código Electoral (Dr. Juan Carlos Aguinaga, Profesor de Derecho Penal Universidad Nacional de Cuyo- La Nación -8/5/2009).
Gustavo Pulti, avalando con su candidatura testimonial, no solo forma parte de esa legión de candidatos kirchneristas que comparten el desprecio por la legalidad y el comportamiento republicano sino que somete al pueblo marplatense a la voluntad de la peor Administración Nacional y Provincial de nuestra historia.
Prisionero de la mayoría de sus promesas electorales como la Ferroautomotora, el Emisario submarino y sobre todo las remesas de dinero para sostener a más de 7.000 empleados públicos que insumen el 70% del presupuesto Municipal, Gustavo Pulti sufrió un inevitable jaque mate que finalizó con su aceptación a convertirse en uno más de los testimoniales K.
La presión del Gobernador Scioli solo fue anecdótica, solo se remitió a recordarle que en política nada es gratis.
El año pasado Pulti había concurrido a todos los actos del kirchnerismo a propósito del inaudito conflicto contra el campo. Ayer se sintió partícipe o cómplice de un Gobierno Nacional que ha hambreado a su Pueblo y enviado al ostracismo internacional a su país.
Ni siquiera el pasado desarrollista del Intendente lo detuvo ante la exigencia de Olivos. Incapaz de generar las inversiones necesarias en su Municipio para conservar cierta autonomía presupuestaria. Incapaz para dialogar con el resto de los Partidos de la oposición planteándoles que la ciudad de Mar del Plata no debía someterse ni doblegarse a las exigencias al autoritario de turno. Incapaz de sostener con su comportamiento que los marplatenses nos debemos y nos deben respeto por la importancia que nuestra gran ciudad merece.
Se puede ser eficiente sin pactar con el diablo. Ser autónomo apostando por el desarrollo económico y social de la comunidad. Ser republicanos respetando y haciendo respetar las autonomías municipales y la esperanza de sus ciudadanos. Ser éticos sin avalar los procedimientos delictivos ni fraudulentos que aquellos inescrupulosos ofrecen.
No todo es igual. Votemos el 28 de junio con memoria y seguramente será un paso más para nuestra madurez como Nación. Premios y castigos. Es lo justo.